El Romeral a 26 de septiembre de 2015
La Pobre Cataluña
Como comentaba en la mi carta, no es
otra nuestra intención, nada mas que acercarnos lo máximo a la verdad de los
temas que son de actualidad, y en estos momentos son muchos los problemas a
distintos niveles, consecuencia, de las
nefastas políticas implantadas y
llevadas por malos gestores de distintos
y variados colores, que están poniendo en riesgo las posibilidades de una
convivencia de entendimiento y de actualización de políticas de unificación que
son las que pueden traernos resultados positivos, a mas corto plazo.
Damos preferencia por su proximidad,
a las Elecciones en Cataluña, del día 27 que deberían ser uno mas de los previstos, de renovación autonómica de
quienes ya han tenido todo el tiempo y no tienen excusa, solo para enmarcas sus
despilfarradas gestiones, sus abusos bravata e insultos al pueblo español,
que han convertido estas en excusa, para
hecha un pulso a la
Nación Española , que ya tendría que haber resuelto esta
situación por derecho legislativo constitucional, no dando nunca la posibilidad
de crear un precedente nacional y europeo a unos embaucadores descuideros, como
son Sr. Mas y Cía. que llevan cinco años
de forma constante como partidarios del si, y que no han hecho otra cosa que
propaganda y marketing político desde las mismas instituciones publicas que
debían gobernar y pagadas por todos.
Han sido ellos quienes se han
empeñado en convertir las elecciones a la asamblea autonómica en un plebiscito soberanista,
con sus desafíos imbéciles y de prepotencias y faltas de respeto, seguidas de
quienes han arropado y no tienen el menor sentido de la dignidad y creen que la
democracia es un juego de irresponsables, para las dos candidaturas que
defienden convertir Cataluña en un nuevo Estado de España y por consiguiente de
la Unión Europea
el próximo domingo se pone mucho en riesgo, su apuesta es doble o nada. De
todas formas sea cual fuesen los resultados electorales, su trampa, es si gano
ya se ha dicho la última palabra y si no gano, lo seguirán intentado tantas
veces, como les de la gana, salvo que el mal sea extirpado en su raíz, que será
lo mas seguro que tenga que pasa.
Está claro que la mejor y principal
regla de juego para cada unos de los pueblos que componemos España, es la vía judicial,
que hasta ahora, ha representado perfectamente su papel de ciega, pero ha sido
no mirando, donde tenia que haberlo hecho hace ya tiempo, siendo inflexible
como así se lo manifiesta la Constitución como todas las cuestiones que pongan
en riesgo la unidad y soberanía del Estado Español.
Por lo tanto la JUSTICIA, tiene que
ser eso justa, pero a la vez asequible, vigilante para el bien de todos y cada
uno de los españoles, sean de donde sea, pero actual moderna y eficaz, estando
estancada como siempre y desde su base a
su cúspide, tiene que ser independiente totalmente de los intereses de partidos
y otros manipuladores, haciéndola única a nivel nacional y europeo, quitándole
las actuales competencias a las Autonomías y unificándola.
No
puede haber Justicia donde hay intereses, y ese es el concepto que nos llega a
los españoles de a pié, que eso y otras mas cosas hace, el alejamiento de los
sistemas que ya sabemos que no es perfecto, pero es el único que tenemos para
una posible convivencia para todos los españoles. Ojala pronto llegue un día
que podamos decir que tenemos el mejor sistema judicial de Europa. Donde no
tengan cabida los descuideros ni malhechores.
Esperemos que sea la cordura y el
sentido común lo que prevalezca, y podamos dejar zanjado un tema que ya nos ha
acarreado muchos problemas, y salvo
error u omisión esta es mi opinión.
Claro, pero ellos son los inteligentes que siempre han tenido el privilegio, que los demás pueblos de España, no han tenido, quien tuvo que emigrar, sacarles las castañas de fuego, porque el Metro de Barcelona quien lo hizo en su mayoría eran obreros andaluces, extremeños y todos aquellos españoles que tuvimos que irnos a buscar la vida, como fuese, ya que el régimen anterior fué quién les dio siempre los privilegios económicos.
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