LA
COMPETENCIA DESLEAL
DE LOS KIOSCOS
Con respecto al artículo publicado hoy, 20 de mayo
de 2014, en el periódico Sur relativo a la competencia desleal que sufren los
kioscos malagueños respecto a otros establecimientos comerciales.
Un
sector regulado por los quioscos en Málaga, concesión administrativa de
aprovechamiento privativo de vía publica, tienen difícil encaje criticar a los
establecimientos comerciales situados que son la competencia desleal suya y van
en contra de la libre competencia.
El sector de los quiosco es un sector
privilegiado respecto a los establecimientos comerciales ya dispone de
situaciones especialmente ventajosas comercialmente respecto a los otros a
precios relativos de alquiler relativamente económicos (tasas de vía publica)
en comparación al arrendamiento de los locales comerciales de establecimiento
sujetos a la libre competencia. En el caso de que la situación no es la
adecuada pueden solicitar el traslado a otros sitios más ventajosos. Los
establecimientos comercial están en donde están no pudiendo cambiar de sitio
salvo con unos gravosos cargas económicas y administrativas.
Los establecimientos comerciales para
iniciar su actividad requieren un proceso de verificación y autorización
administrativa y normativa (licencia de apertura), caso que no sufre los
quioscos.
Es criticable que un sector regulado y
cerrado como los quioscos pueda indicar que los establecimientos comerciales actúan
deslealmente cuando ellos son la competencia desleal al comercio libre. Son un
régimen de excepción de comercio regulado, y por ello sometido a las
condiciones que indican su especialidad.
Hay que recordar que la libre
competencia son los establecimientos comerciales situados a pie de calle que
sufren toda la carga de la competencia sin ayudas ni resguardos de alguna
clase.
Ante de criticar la competencia desleal
de resto, hay que pensar mejor que falla en el modelo de negocio de los
quioscos y adaptarse las nuevas realidades del mercado como el resto de
establecimiento comercial.
La normativa de regulación de tabaco y
el alcohol es favorable a los quioscos ya que permite de productos del tabaco
en lugares donde es habitual la presencia de menores.
En esta retórica, deberíamos declarar
una ley de monopolio de venta de golosinas, chucherías y prensa de venta exclusiva
en los quioscos de la vía pública o una campaña contra los establecimientos
comerciales chinos por ser extranjero. Esa son las salidas que nos dejan.
La salida adecuada es encuentra en
copiar lo que va bien. El trabajar más horas para estar más horas abiertos al público.
Debe ser imaginativos en encontrar nuevos productos que atraigan al público
(venta en telefonía móvil y sus recargas, loterías y juegos, regalos, bebidas y
alimentos, puntos de venta de suministro de electricidad y gas, recarga de
tarjetas de transporte o apuestas online, entre otras). Eso mismo otros
sectores regulados (los estancos) se han adaptado al exigente mercado y no
critican que si sufren competencia desleal por el tabaco de contrabando, que si
es competencia desleal.
Es más fácil criticar la competencia
desleal a los quioscos de los establecimientos comerciales, cuando es
justamente al revés la competencia libre es la de los establecimientos
comerciales y la excepción regulada y concesional son los quioscos. Si el
negocio no va tiene una salida más fácil que la crítica competencia, abandonar
la concesión administrativa concedida para que otro más capaz sea rentabilizar
la vía publica de forma más rentable que el modelo tradicional de quiosco que
propugnan.
Tiene unos alquileres más reducidos que
los establecimientos comerciales que le rodean, un sistema de exclusión por
distancia de otros quioscos, unos gastos de suministros energéticos más
reducidos. En definitiva, son un sector privilegiado y lobista que critican el legítimo
ejercicio de la libre competencia de los establecimientos comerciales como
competencia desleal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario