Valle del
Guadalhorce, Tierra de Miel y Sol, de Luz y Color, y de Gente Trabajadora
Publicación
Sociocultural Año XV Número 62 Agosto-Noviembre 2016
Calles de AlhauríN El
Grande
CALLE
SAN RAFAEL
SALVADOR DAVID PEREZ
GONZALEZ
El
origen de esta calle está íntimamente ligado al asentamiento en nuestra
localidad, en la primera mitad del siglo XVIII, de la familia Villareal,
perteneciente a la baja nobleza. Un ilustre miembro de la misma sería el
religioso Francisco Manuel de Villareal y García, que ve la primera luz en
Alhaurín El Grande en 1747, llegando a Este personaje, que se erige como una de
las personalidades más sobresalientes de la villa de Vicente Manuel Martín de
Villareal y Ampudia, natural de Montalbán, y de la alhaurina Ana García del
Castillo Benítez[1].
Su padre había ocupado los cargos de regidor decano y teniente de corregidor,
así como el de alcalde de la Santa Hermandad Vieja de Toledo, indicando en su
testamento, fechado en febrero de 1751, cómo su hijo Francisco Manuel ya se
encontraba en la ciudad del Guadalquivir como clérigo de menores de órdenes y mayordomo del Iltmº Sr Dn Francisco de
Solis, arzobispo Gobernador del arzobispo de Sevilla[2].
Su fructífera carrera religiosa se prolongaría por espacio de varias décadas al
servicio del culto de la catedral hispalense, una de las más importantes,
prestigiosas y ricas de la España de la época junto a las de Toledo y Santiago
de Compostela. Prueba de su importancia sería el entierro en el templo de su
hermano Juan de Villareal, fallecido en noviembre de 1774[3].
Durante
su estancia en Sevilla Francisco Manuel de Villareal reformaría la capellanía
fundada, en 1770, por su abuela Micaela Martín de Ampudia. Una institución
eclesiástica consistente en una solemne misa que todos los años debían decir,
el día de San Rafael, los Beneficiados de la Parroquia de Nuestra Señora de la
Encarnación estando en ella Su Majestad
Sacramentado y Patente, solemnizándose, además, con vísperas cantadas y tercias cantadas después de concluidas un responso;
todo lo cual se ha de aplicar para Sufragios del Alma de el mismo Señor Presbítero
Dn Francisco Villareal, la desus hermanos y también por la alma del
excelentísimo y Eminentísimo Señor Cardenal Dn Francisco de Solis Arzobispo que
fue de dicha Santa Yglesia Patriarcal de Sevilla, Amo y Protector que fue del
el repetido señor difunto[4].
Para correr con todos los gastos la familia Villareal vinculaba dos de sus
fincas, con cuyos réditos se afrontarían los cultos. La documentación
específica que una de ellas estaba situada en el partido de la Peñuelas,
mientras que la propiedad a la que daba paso el Portón de San Rafael. De ahí
ese hombre.
Entrada
por CL Molinos de Arriba y Salida por CL Albaicín
Los
documentos señalan como en 1840 la ya denominada Huerta de San Rafael aún seguía vinculada a la Iglesia, motivo por el cual el párroco
José María Borrajo procede a arrendarla al vecino Antonio Pérez Castillo
durante seis años o, en su defecto seis
cosechas, contando los mismos desde el día de San Miguel de 1840 a la misma
festividad de 1846. Por cada uno de ellos debería abonarse la cantidad de
ochocientos reales pagaderos el día de
Todos los Santos[5].
Con el
paso del tiempo, en torno a la tapia de la huerta, nacería la actual calle San
Rafael, que ya aparece citada en la segunda mitad del siglo XIX.
[1]
(A)rchivo de la (I)nstitución (C)olombina. Expediente de Limpieza de Sangre.
Núm. 686. Francisco Manuel Villareal y García.
[2](A)rchivo
(H)istórico (P)rovincial de (M)álaga. Leg. P/7008. Testamento de Juan de
Villareal. 7 de febrero de 1751.
[3]
ANTEQUERA LUENGO, J.J., Memorias
sepulcrales de la Catedral de Sevilla. Los manuscritos de Loaysa y Gónzalez de
León. Sevilla, 2008, pág. 134.
[4] A.H.P.M.
Leg. P/7025. Escritura de Fundación de Patronato de San Rafael Arcángel. 4 de
abril de 1803.
[5] A.H.P.M.
Leg. P/7037. Escritura de arrendamiento del Patronato de San Rafael Arcángel
contra Antonio Cansino. 9 de febrero de 1840. Fº 24 y siguientes.
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