Málaga, 22 de Septiembre de 1881. En la casa
número 41 de la calle Beatas de la ciudad de Málaga se había citado al entonces
Alcalde de Málaga, don José Alarcón Luján, junto a los representantes de la
Compañía de Jesús: P. Pedro Sáenz de Cenzano, P. Agustín Delgado y el P. José
María Vélez y además del señor Alcalde, en representación de la ciudad: don
Antonio Campos Garín, don Manuel de Lara y Cárdenas, don salvador Solier y
Pacheco, don Antonio Cebrián pardo, don Antonio Alarcón
Almohalla, don Federico Grund Cereco, don Mateo Castañer Vilchez, don Carlos
Félise Fynge, don Manuel Gómez Sánchez, don Francisco López Bueno, don Juan
Brignoli Montero y don Constantino Grund Cerezo.
En la reunión se dio lectura del proyecto para constituir la Sociedad Constructora del Colegio de San
Estanislao, en la finca entonces conocida como La Casa Grande, propiedad de don Antonio Campos Garín, el cual la
había cedido gratuitamente para este proyecto, junto con todo el terreno que
fuese necesario, para ejecutar el proyecto presentado por el Arquitecto don Jerónimo
Cuervo González.
La extensión de la finca arrancaba en las estribaciones del
monte de San Antón y llegaba hasta la orilla del mar y por estar poblada de
almendros que en primavera se convertían en un hermoso espectáculo al florecer
todos a la vez, era conocida como finca
de Miraflores.
Al nuevo Colegio se decidió poner el nombre de San Estanislao
de Kostka, en memoria del joven polaco que falleció con 18 años; ya que era el
jesuita fallecido más joven hasta entonces de la Compañía de Jesús, ya que el
edificio estaba dedicado a los jóvenes.
A pesar de ello, desde la cercana barriada de pescadores de
El Palo, se le puso el nombre Colegio de
Miraflores de El Palo.
De esta forma, el cartameño don José Alarcón Luján, plasmó su
firma en la creación de un centro educativo que se inauguraría al siguiente año
de 1882 y pasaría a ser un referente para la ciudad.
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