jueves, 17 de septiembre de 2020

Teba, 17 de Septiembre de 1864.


Teba, 17 de Septiembre de 1864. Nacimiento de Doña Concepción Peñalver Durán, , hija de don Francisco Peñalver y Torres-Lineros y de doña Concepción Durán; llegó a Cártama al contraer matrimonio con don Diego Salcedo Durán, y se instalaron en la casa solariega de la familia Salcedo, esquina de las calles del Viento y Sáenz de Tejada.
Don Diego se dedicó a labores políticas y administrativas de sus propiedades, tanto en Cártama como en Málaga y otras poblaciones. Para el matrimonio no fue posible tener hijos, pero a cambio ambos fueron muy dados a la beneficencia, especialmente doña Concha, que con frecuencia hacia generosos donativos a la iglesia que solía hacer colectas de comida y ropa para repartir entre los pobres; pero además doña Cocha también repartía comida en su propio domicilio, a pesar de residir en Málaga. Por esta razón era muy celebrada su llegada al pueblo. No hay que olvidar que hasta principios del siglo XX era un distintivo de nobleza y procedencia de buena cuna los gestos generosos para con los semejantes menos afortunados.
Pero, además, doña Concha se ocupó en numerosas ocasiones de homenajes o celebraciones especiales, de organizar el lunch de comida para los asistentes, lo que hoy sería el catering, como recogen las hemerotecas.
Fallecido su esposo en 1935 de muerte natural, doña Concha abandonó su lujosa residencia de Málaga, en Villa Salcedo, situada en el Paseo de Sancha, junto al Limonar; para trasladarse a su casa de Cártama, donde se recluyó en soledad, tan sólo acompañada por su fiel sirvienta, doña Rosario Miranda Luque, y la visita del administrador de sus fincas, don Miguel Díaz Cordero.
Pero a la llegada de la Guerra Civil pusieron los milicianos sus ojos en la casa de esta señora, con intención de convertirla en Ayuntamiento y ahorrase el alquiler de la casa que hasta entonces había servido como tal en la plaza; y de usar la torreta neomudejar que la adorna para vigilar la llegada de la aviación franquista y avisar a Málaga con tiempo.
Para ello el 3 de septiembre de 1936 llegó una patrulla de milicianos a su casa con orden de detenerla, a lo que su sirvienta se negó rotundamente, pero ante la insistencia de los milicianos de tener que cumplir la orden recibida la sirvienta dijo que ella no abandonaba a su señora y donde la llevaran la acompañaría. Así quedaron las dos mujeres recluidas en la sede del Comité, hasta altas horas de la noche en que ambas señoras fueron trasladas a la carretera de Málaga, y ya fuera del término fueron asesinadas. Sus cuerpos fueron recogidos al día siguiente y se les dio sepultura en el Cementerio de San Rafael en fosa común.
Resulta difícil de entender en que pudo beneficiar este acto a la República, que de esta forma agradeció a esta señora su generosidad en el pasado. En cualquier caso, algunos de los participantes en este acto se encuentran hoy enterrados en Cártama y serán sacados sus restos para darle una digna sepultura.

No hay comentarios:

Publicar un comentario